Lo que fue y lo que vendrá. Brevísimo resumen del 2015

Ya está terminando enero y recién hemos encontrado un tiempecito para hacer la típica recapitulación de lo que paso durante el año 2015. 

Por alguna razón que se nos escapa, para muchos el año que pasó no fue el mejor (no es nuestro caso). Cosas sociológicas o sicológicas que en realidad no son muy fáciles de establecer. Ya saben, el reino de lo subjetivo. Pero aquí van algunos de los hechos, historias, tendencias que vivimos durante el 2015:

El verso de la alcaldesa de que no iba a volver a postularse. Desde junio, más o menos, y durante casi todo el 2015, y a quien quiso escucharle y a quien le preguntó, dijo que no iba a continuar. Pero terminó cediendo a los “clamores populares” para que continuara. Mas información sobre eso, y que tanto fue el clamor, AQUÍ >>

El caso Martinson. Suena feo decirlo así, porque Kurt es una persona y su familia aun está sufriendo, a las horas que escribimos eso. Pero durante todo el 2015, por una u otra razón, fue un tema que no dejó de estar presente. Sobre eso, nos pronunciamos AQUÍ >>

Nuestros vecinos y amigos de SQM estuvieron en el candelero casi todo el año. Aunque aquí, no se notó demasiado. Será que toda la basura removida a nivel político nacional, nadie a querido removerla al nivel municipal y local. Este 2016, con las elecciones ad portas, ¿será el momento? Lo veremos.
Nosotros hablamos harto de SQM durante el año. Ya se verá lo demás.

Otro tema que sigue resonando es la intención del estado (Ministerios, intendente y alcaldesa) de enchufar San Pedro al Sistema Interconectado del Norte Grande. Después de un fuerte impulso en enero, las aguas parecieron aquietarse. Pero ya vienen de nuevo. 

También estuvo en cuestión el tema del agua. Si el 2014 fue el tema de la represa y la junta de vigilancia, el 2015 fue la discusión sobre el código de aguas, los regantes y sus incansables aunque infructuosas solicitudes de agotamiento del río San Pedro. Y claro, la discusión sobre como un par de particulares vendieron sus derechos de aguas (legalmente) a una compañía hotelera. 

Otro tema fue la construcción del nuevo museo. Ahora que ya se están trasladando las colecciones embaladas al museo nuevo y que la demolición del antiguo es un hecho inminente, recordamos que a lo largo del año hubo varias discusiones entre las comunidades indígenas, el museo y la municipalidad. Pero lamentablemente lo principal, que es el patrimonio, fue un tema secundario.

También podemos reseñar el surgimiento de Rockwood Lithium como un agente más activo en la relación con las comunidades, un turismo que siguió sin regulaciones, los perros, muchos proyectos, mucho desorden, el ridículo incidente de la laguna Cejar y la organización conocida como la Comunidad Indígena de Solor, mayor represión de carabineros a las fiestas clandestinas, los periódicos accidentes en la cuesta del cuervo, las lluvias en marzo, buenas cifras en los negocios turísticos, nuestro programa en la radio, etc.

El año 2016, que duda cabe, estará más o menos marcado por la elección de alcalde. Pero, a menos que ocurra algo muy extraño, nuestra señorita seguirá a cargo. Hasta el 2020. 

¿Y que más?