Camar, ¿la localidad más postergada?

Los problemas de Camar y en especial el abandono que sienten sus habitantes son ya de larga data

Envie este Reportaje Version de impresion de este Reportaje Publicado el 10 de Diciembre de 2014 Visto 398 veces

Los problemas de Camar y en especial el abandono que sienten sus habitantes son ya de larga data. Fama de reclamadores y conflictivos, tienen. Pero como veremos, quizás tengan razón.
La última guinda de la torta fue el caso de los índices de arsénico del agua.

El agua potable de Camar

Recordemos que en noviembre del 2012, la planta piloto se inauguró con bombos y platillos, con la asistencia del entonces Intendente de la Región de Antofagasta, Pablo Toloza, el Subsecretario de Desarrollo Regional y Administrativo, Miguel Flores, y la Alcaldesa de San Pedro de Atacama, Sandra Berna, ocasión en la que  brindaron con agua, supuestamente de la planta. Aunque en realidad esta no estaba funcionando todavía, por lo que se utilizó para brindar, el agua de unos chimbombos especialmente llevados para la ocasión. En una visita posterior a Camar, sus comuneros nos mostraron en un rincón de la planta, que no estaba funcionando, los chimbombos abandonados por la comitiva.

Esta inauguración incluso fue mostrada en el noticiero de 24 horas, de TVN, especialmente debido a las novedosas características técnicas de la planta (ver, minuto17 >>)

Después de la ceremonia, ahí quedó la planta. Sin uso, por casi dos años.


Todos felices en la inauguración.


La planta, en febrero de 2013. Sin uso.


Chimbombos usados en la ceremonia

Con ocasión de la denuncia sobre los altísimos niveles de arsénico (Ver  noticia >>) que reveló un estudio encargado por el Consejo Regional, a raíz de una denuncia presentada por los propios cameños, nos enteramos de que la planta había sido reactivada, y que si la información era correcta, algo estaba muy mal.

Conversamos el 15 de octubre con la alcaldesa, que nos dijo que el asunto estaba siendo manejado, que sería resuelto y que ella pediría recursos para ampliar la planta, ya que “la planta no está dando lo que Camar está consumiendo”, además que se estaba mandando un camión con agua todos los días. Ella se manifestó algo molesta con la empresa a cargo de la reactivación, ya que “no nos habían dicho nada”. Además la alcaldesa aprovechó de culpar a los propios cameños, debido a que el origen del problema era porque ellos mezclaban el agua potable con agua cruda y “eso no se hace”.

Pero consultados los cameños, nos indicaron que en realidad el municipio no había hecho nada, a excepción de enviarles una notificación exigiendo que no mezclaran el agua potable con el agua cruda. Camión aljibe no habían visto después de 10 días de denunciado el hecho.


Notificación de la municipalidad, una orden imposible de cumplir.

Según fuentes de la empresa a cargo de la reactivación, el real origen del problema es que el proyecto quedó inconcluso, ya que no se completó la parte más importante, que era crear una segunda red para distribuir el agua a las casas, compromiso adquirido al proponerles, la municipalidad y  la subsecretaria de desarrollo regional, el proyecto a la comunidad de Camar en el 2011.

Según la misma fuente, la producción de agua fue calculada sobradamente para el consumo de agua potable domiciliaria. Esta produce 12 metros cúbicos al día, que basta para cubrir las necesidades de consumo. Pero la misma red además se usa para riego, lo que aumenta el consumo a 30 metros cúbicos al día. Pero la planta no fue diseñada para eso. Por eso la necesidad de la segunda red, exclusiva para consumo domiciliario, dejando la red antigua para le distribución del agua de riego, no tratada.

Lo que sucede es que la red actual, supuestamente provisoria el año 2012, también debe proveer agua de riego. Además de las filtraciones y deficiencias de la red, ya muy antigua, que hacen más grandes las perdidas.

En resumen, la planta se reactivó en septiembre de este año, después de estar abandonada por largo tiempo, pero no se consideró que debía concretarse la segunda red de distribución y un estanque, compromiso que se había adoptado, por escrito, al comenzar el proyecto en el 2012. Eso fue l que produjo el colapso y la contaminación.

La planta en si funciona correctamente y es operada por el comité de agua de Camar, sin problemas. Solo que el agua que sale de las llaves llega contaminada.

Una solución definitiva tampoco sería tan cara. Se calcula que el costo de la segunda red llegaría a los 90 millones. 

Para terminar, se nos contó que Jaime Coria, de la dirección de obras de la municipalidad, y único personero que había aparecido por Camar,  había solicitado que si salud ambiental preguntaba, se les informara que el municipio estaba enviando un camión con agua diariamente. A lo que se negaron, obviamente.

El tema del agua potable contaminada es aun más duro para esta comunidad, que tiene la ilusión de poder llevar adelante proyectos de turismo, ámbito del que se sienten hasta ahora excluidos, frente a la bonanza de otras comunidades. Pero “sin agua potable, como traemos turistas”, al decir de un comunero.

A raíz de este problema y otros, desde octubre los cameños estaban solicitando una vista de la alcaldesa, la que solo se vino a concretar hace unos días.

El abandono de Camar

Pero el agua no es el único problema de Camar. Durante los últimos meses de 2014, han estado con graves problemas de energía eléctrica, ya que el generador existente está colapsado y la planta fotovoltaica que apoyaba la generación está abandonada y en desuso. 
Este problema que hizo crisis en octubre, casi en paralelo al problema del agua, también recibiría una solución definitiva, según las últimas promesas de la alcaldesa, como veremos más adelante.

La queja reiterada de la comunidad es que el municipio los tiene, en general, postergados y no soluciona sus problemas a tiempo y eficientemente, toda vez que solo aparecen cuando hay una crisis grande y a veces ni así.
Se sienten como la localidad menos favorecida y recuerdan que en el 2012 incluso tuvieron que hacer un paro en la escuela, para llamar la atención de la autoridad. (ver noticia aqui >> y aquí>>)
Este paro motivó la inmediata visita de la alcaldesa, que se comprometió por escrito en arreglar el tema de la escuela, promesa que hasta ahora no se ha cumplido.
Paradójicamente, para que el proyecto de la escuela pudiera ser puesto en marcha, tendrían que tener el problema del agua solucionado. Aunque eso no ha impedido que en el antiguo e inadecuado edificio actual, la escuela ha seguido funcionando.
 
Además de todo, sus reivindicaciones territoriales han sido constantemente postergadas frente a las de otras comunidades y para rematarla, sus tierras más tradicionales de pastoreo, están siendo depredadas por las extracciones de agua de SQM, empresa que tampoco ha apoyado a Camar de la misma forma que ha apoyado a otras comunidades.

La alcaldesa al fin visita Camar

Después de los problemas de octubre, el municipio pareció recobrar el interés por Camar, y la alcaldesa se reunió el jueves 4 de diciembre en la noche con la comunidad, en una reunión más bien sorpresiva y a la que no se alcanzó a convocar a toda la comunidad de la localidad situada en el borde del Salar.

Posiblemente esta urgencia por resolver los problemas de la localidad tenga algo que ver con que el día viernes 12 de diciembre se realizará la reunión de la ADI en Camar, y nos imaginamos que el intendente y el gobernador no querrán encontrarse con la lista de reclamos sin resolver de la comunidad, que como vimos, no son pocos.

Obviamente, la señorita Sandra se encontró con un ambiente hostil, tanto, que en algún momento debió hacer un llamado a que la gente se calmara y se expresara respetuosamente.

No es ingenua nuestra alcaldesa, y como buena política que es, llegó, al decir de un comunero, con una actitud medio prepotente, defensiva, acompañada por Patricia Lanas, Paola Piñones, y Daniel Rodríguez, entre otros.

Tres días antes, la municipalidad había enviado un camión con petróleo para el generador, y desde el miércoles estaba comenzando a llegar un camión con agua potable, para paliar en algo la delicada situación de este vital elemento.

En la reunión, la alcaldesa se comprometió a: Arreglar la planta de tratamiento de agua; comprar un nuevo grupo electrógeno; arreglar la planta fotovoltaica, para que haya más energía; habilitación de 15 hectáreas para sembradío de alfalfa y prometió luchar por una posta para Camar, 

Además les informó que el proyecto para la escuela nueva estaba por terminarse. Es decir, reiteró el compromiso adquirido por ella en el 2012, por escrito también, en una asamblea parecida a esta.

Todas estas son promesas ya echas en otras ocasiones, para solucionar los problemas de la comunidad y que ahora quedaron por escrito en un acta que firmó, aunque en palabras de un comunero “No confiaban hasta que las cosas estén echas”

El tiempo dirá si esas promesas son cumplidas por Sandra Berna y si al fin los cameños pueden empezar a mirar su futuro con más optimismo, para que también les toque algo de la bonanza del turismo y la minería que parecen haber recibido en mayor grado otras comunidades del Salar.

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