San Pedro comienza a levantarse con llegada de turistas nacionales

CON DISTANCIA ADECUADA Y LOS PROTOCOLOS CORRESPONDIENTES POR LA PANDEMIA, LOS VISITANTES PUEDEN RECORRER SAN PEDRO DE ATACAMA EN BICICLETA

LOS RESTAURANTES AHORA PUEDEN ATENDER EN LAS AFUERAS

Después de meses de calles vacías, el relajo en las restricciones permitió abrir algunos locales y, con ello, comienzan a verse visitantes de distintos puntos del país. A falta de sitios turísticos abiertos, los touroperadores están visualizando mostrar sitios alternativos, como Jama o el Alto Loa.

Hace meses que Arturo Huenchunao y Graciela Barrera no paseaban por San Pedro de Atacama. Con la pandemia y las restricciones de viaje, las calles que antes estaban repletas de turistas de todas partes del mundo, hoy se ven vacías y silenciosas. Aunque tampoco tan-tan vacías: el avance en las fases del plan "Paso a Paso" ahora permite viajar sin inconvenientes al pueblo desde comunas en fase 3, y unos pocos turistas nacionales están volviendo a circular por San Pedro.

Arturo y Graciela vinieron desde Calama a pasar unos días. Con mascarilla y distancia de otras mesas, pasaron a un restaurante a pedir unas papas fritas, algo que no se podía hasta hace poco. "Está agradable", dice Huenchunao. "Ahora ha bajado el turismo, pero se va a empezar a reactivar", suma Barrera.

En el restaurant "La Plaza", la reapertura partió a mediados de septiembre. "Obviamente nada es como antes, porque no hay turistas extranjeros sino nacionales, y es poco el que llega. Pero las ventas se han mantenido regularmente dentro de todo", cuenta su administrador, Achim Solano. En este tiempo, Solano recuerda que las visitas vienen de Arica, Antofagasta, Tocopilla, Calama, y también de Santiago. "Cuando estemos en fase 4, que esperamos estar pronto, se abrirán más comercios para que la gente pueda seguir vendiendo sus productos".

La tradicional calle Caracoles, en el centro del pueblo, sigue mostrando los efectos de la pandemia. Muchas puertas cerradas, pero entre local y local, se asoman las pizarras con menús ofreciendo almuerzo a los visitantes, al parecer un poco más barato de lo que se veía antes.

El turismo se adapta a la pandemia. Con el calor del mediodía el tapabocas sofoca un poco, pero al rato ya se hace costumbre. Un grupo de amigas se toma la clásica foto frente a la iglesia: una de ellas se saca la mascarilla y salta para que la fotógrafa inmortalice su imagen en el aire. Después, vuelta a ponerse la mascarilla.

Opciones

En los alrededores no hay muchos lugares donde ir porque los sitios turísticos -como la laguna Cejar- están cerrados, pero los operadores se las están arreglando para mostrar lugares no convencionales. Cristian Ibarra, presidente del gremio de los touroperadores, dice que se pueden ofrecer servicios de trekking. "Yo también estoy viendo la alternativa de operar desde Calama, porque desde los alrededores tenemos salares y volcanes", cuenta. Hace poco fue con un grupo a la laguna Inca Coya (cerca de Chiu Chiu) y el Alto Loa. "La gente está con los brazos abiertos allá, quiere que los vayan a visitar".

Ibarra plantea que, a falta de sitios en San Pedro, a los visitantes se les puede mostrar el mirador de Chuquicamata, los geoglifos de Chug Chug o la ruta salitrera. "Lo único que necesitamos es que las comunidades tomen la decisión lo antes posible, y tengan sus protocolos listos para abrir", dice. Varios de sus socios en el gremio se han ido del rubro, cuenta, y otros han cambiado de giro.

Eduardo Yanjari, presidente de la Cámara de Comercio de San Pedro de Atacama, explica que el domingo pasado fue cerca del paso Jama y estaba lleno de autos. "El problema es que las personas cuando vienen en sus autos particulares, no tienen la precaución de cuidar el medioambiente, sino que se meten por cualquier lado", plantea.

Al igual que Ibarra, Yanjari dice que hay otros lugares como el salar de Aguas Calientes, o Jama, que se pueden visitar. Y si bien la pandemia no ha parado, Yanjari es optimista con la llegada de turistas al pueblo. "Hay que aperturar (…) con todas las medidas de seguridad para no poner en riesgo a la población local, y haciendo un turismo responsable".