"Hay parlamentarios que desde fines del 2014 pedían que saliera del cargo"

A las 8.40 horas, un poco más tarde de lo habitual, el abogado DC Valentín Volta Valencia ingresó al edificio del Gobierno Regional ya convertido en virtual exintendente de la región.

La noche anterior (jueves) había recibido un llamado de la Subsecretaría del Interior donde se le pedía que pusiera su cargo a disposición y se le agradecían los dos años y ocho meses que ejerció como autoridad.

Así, la breve jornada de ayer en el edificio de calle Prat sólo estuvo dedicada a la firma de papeles y a las despedidas.

Volta dejó la Intendencia tras semanas de tensas relaciones con la Nueva Mayoría y justo en momentos que en el Congreso se discute la elección popular de los gobernadores regionales, cargo donde tiene puestos los ojos hace tiempo.

Lo hace además dolido con los partidos y los parlamentarios de su sector, "en especial los radicales", a quienes acusa de ser un factor en su renuncia forzada.

Renuncia

¿Estaba consciente que noviembre podía ser el mes de su salida?

-Siempre lo vi como una posibilidad. Primero porque es un hecho que después de las elecciones tienen que haber evaluaciones y segundo porque aquellos que querían ser candidatos en general, tenían que plantear su situación en este mes. Entonces, estábamos viviendo un periodo crítico, pero yo estoy tranquilo por la evaluación de las tareas que la Presidenta me pidió, y entiendo que por esa evaluación es que se me ha permitido plantear una salida para una eventual candidatura, es decir, no me voy en medio de una crisis o un cuestionamiento...

¿Pero me está diciendo que de no existir interés suyo en ser candidato a gobernador regional, podría haber continuado?

-Eso es difícil de saber, por cierto reconozco que tenía un escenario político partidario complejo. Es de público conocimiento que los partidos pidieron mi renuncia, que varios parlamentarios también y, por lo tanto entiendo que mi permanencia pudiera haber sido una situación insostenible para la Presidenta.

¿Lo pregunto porque queda la impresión que para usted, independiente de qué decidiera desde el punto de vista electoral, era difícil seguir gobernando la región?

-Puede ser, y en ese sentido yo soy muy empático con la Presidenta y con el gobierno. Es claro que hubiera sido difícil sostenerse en esas condiciones tan adversas.

¿Por qué las malas relaciones con partidos y parlamentarios?

-Creo que hay una matriz común y tiene que ver con el poco involucramiento de los partidos y los parlamentarios en las tareas de gobierno. Yo nunca, salvo excepciones, escuché de algún dirigente partidario una preocupación por el tema del empleo, o los campamentos, o el déficit habitacional, o la salud, nunca. A mí me interesaba que los partidos me dijeran: intendente ojo con esto, estamos preocupados de esto... pero eso no ocurrió.

En el caso de los parlamentarios lo mismo. Nosotros los primeros dos años los invitamos a distintas cosas, pero siempre hubo poco interés, problemas habitacionales, la salud, no se pronunciaban.

Y si no era de eso, ¿de qué estaban preocupados?

-Prefiero que le pregunten a ellos de qué estaban preocupados. Yo sólo diré de qué no estaban preocupados.

¿Cuánto afectó ese quiebre su relación con Santiago?

-Mira, en la gestión propiamente tal, y ahí puede haber matices, yo entiendo la preocupación y el foco del gobierno en el interés de la ciudadanía, en resolver los problemas de la gente, y en eso creo que no afectó, porque finalmente la institucionalidad pública funcionó con los énfasis que queríamos. Pero por cierto afectó la gobernabilidad, que es mucho más que la gestión. Ahí, sin el apoyo de los partidos y los parlamentarios, es muy difícil.

Y efectivamente tanto el ministro (Rodrigo) Peñailillo en su minuto, como el ministro (Jorge) Burgos en su minuto, me señalaron que había un abierto interés, estoy hablando desde finales de 2014 y todo el 2015, de algunos parlamentarios de que yo me fuera. Es decir, abiertamente le pidieron mi renuncia a estos ministros, me lo dijeron ellos mismos.

Desde fines de 2014, es decir, con menos un año de gestión ya lo querían fuera...

-Menos de un año. Y yo me dediqué a trabajar, no digo que deseché la relación con los parlamentarios, tratamos de reconstruirla, renovarla, pero finalmente tuve poca esperanza en aquello y me dedique a sacar la pega. (...) Yo como intendente no sentí ni el involucramiento ni el apoyo de los partidos políticos ni de los parlamentarios, en particular de los parlamentarios radicales.

¿Cuánto lo golpeó eso en lo personal y en lo político?

-Primero no corresponde a los parlamentarios ni defender ni atacar la continuidad del intendente, ese es un cargo que dispone la Presidenta y así como a mí no me complicó que me pidieran la renuncia, tampoco me complica que me apoyen o no me apoyen. Por eso creo que hay una lógica muy interesante en la elección de los futuros gobernadores regionales, quienes no sólo van a tener una relación de independencia de la Presidencia de la República, sino que también tendrán mayor independencia y legitimidad respecto a los parlamentarios, eso es algo muy bueno.

Elección

¿Qué tan decidido está a postular a gobernador regional?

-Me gustaría mucho, es una tarea que ya conozco, yo no sólo he sido intendente ahora, he tenido tareas a niveles ministeriales y por tanto conozco cómo funciona el Estado. Y si además tenemos la oportunidad de un gobierno regional 2.0 o 3.0, con más facultades con más recursos y más legitimidad, encuentro que lo que uno pudiera hacer desde allí sería importante.

¿Realmente es posible que tengamos elecciones en 2017?

-Lo veo factible, el gobierno le puso suma urgencia al proyecto, fue aprobado por amplia mayoría en la Cámara de Diputados y lo que queda hoy es una mera formalidad en términos de cómo se llama el delegado presidencial, así que me parece que se han dado grandes pasos.

Y si la ley no se aprueba, porque se requieren quórum elevados, ¿cuál es su plan b?

-No tengo plan b, de verdad, seguiría en otra cosa a lo mejor. Si tú me preguntas por ser diputado, no es algo que me conmueva, ni tampoco diré que lo voy a pensar en marzo, no. Yo tengo mi foco en otra cosa, y si puedo contribuir a través de la Democracia Cristiana, de la bancada, preparando un paper para la discusión de la ley que le entrega atribuciones a los gobernadores regionales, lo haré, porque eso es lo que me interesa, lo demás no está en mis planes.

Para ser candidato en 2017 necesitará el apoyo de los partidos políticos y los parlamentarios, ¿cómo le afectará la mala relación que existe hoy?

-Me puede afectar, y tendré que ver cómo construyo o reconstruyo esas confianzas. Yo me voy tranquilo en esa relación, primero porque no han encontrado en mí nunca un menoscabo a la labor de los partidos o los parlamentarios, al menos públicamente, nunca. He procurado siempre tener relaciones institucionales con ellos, pero estábamos en sintonías distintas, si el día de mañana nos podemos sintonizar, sería óptimo.

Pero quiero aclarar algo. Yo no soy de los liderazgos populistas, pero sí tengo gran esperanza en la que ciudadanía también reconozca liderazgos. Si eso es con los partidos y los parlamentarios, extraordinario, pero si no, quien manda acá es el pueblo.

¿Cree que el gobierno vería favorablemente su candidatura?

-Entiendo que sí, así como ve con interés que ministros, parlamentarios, subsecretarios, intendentes puedan ser candidatos a senador o diputados, porque el gobierno tiene interés en seguir su obra.

Efectivamente las posibilidades de que gane Chile Vamos (la próxima presidencial) existen, y eso puede poner en riesgo la obra ya hecha, por eso es un interés de todos que surjan liderazgos que defiendan la actual obra de gobierno.

Volta explicó que su relación con la Presidenta Michelle Bachelet siempre fue cercana. "Ella tuvo mucha confianza conmigo. Vino once veces a la región , no sé qué otro intendente puede decir eso".

"La diputada Núñez (RN) hizo la pega, no sé si la diputada Hernando (PR) la hizo", dijo Volta para explicar la incidencia de los parlamentarios en las elecciones municipales. En efecto, la RN logró cinco alcaldías.

El exintendente reconoció falencias en lo político, mas no en lo técnico. En este último plano destacó que "en nuestra gestión, superamos lo invertido en salud en los dos gobiernos anteriores (Bachelet y Piñera)".

Hitos de su gestión

Aluviones
Una de los momentos más complicados para Volta fueron los aluviones ocurridos en Taltal y Tocopilla, producto de intensas precipitaciones. El 25 de marzo de 2015 una fuerte lluvia cayó en el norte, pero en la región causó un aluvión que casi partió en dos a Taltal, aunque el daño fue mayor en Copiapó, Chañaral y otras localidades de la Tercera Región. El 9 de agosto de ese mismo año, un aluvión en Tocopilla deja siete muertos (al menos tres fallecieron semanas después de la tragedia) y millonarios daños por la destrucción de viviendas, sobre todo en la población 5 de Octubre. El Gobierno decretó Estado de Excepción Constitucional en la comuna, lo que permitió el rápido envío de recursos para la emergencia.

El 19 de julio de este año, el canciller boliviano David Choquehuanca -junto a una comitiva de parlamentarios- realizó una visita 'inspectiva' al sector Portezuelo e instalaciones del Puerto de Antofagasta, un día después de hacer lo mismo en Arica. La Cancillería sólo autorizó la llegada de Choquehuanca en calidad de turista, lo que tuvo que ser dejado en claro por Volta, quien estuvo al tanto del conflicto con Bolivia en todo momento. Las autoridades bolivianas incluso dieron una rueda de prensa, que terminó la entonación de la canción del mar.

INMIGRANTES

Más de 36 mil extranjeros gestionaron su residencia definitiva o tramitaron visas u otras acreditaciones durante en 2015. El exjefe regional tuvo que lidiar con la mayor ola de inmigrantes que registra la historia de Antofagasta, sobre todo de Colombia, Perú y Bolivia, entre otros.