Baja de fondos y nuevas políticas son los primeros efectos del Censo

Envie este Recorte Version de impresion de este Reportaje Publicado el 07 de septiembre de 2017 Visto 153 veces

Población menos numerosa de la esperada impactará en el FNDR, los fondos municipales y en distintas políticas sociales. Habrá que pensar en "para quién se invierte", indican los expertos consultados.

La diferencia entre las proyecciones de población del INE (640.950 habitantes) y los datos preliminares del Censo en la región (599.335 personas), aún no tiene una explicación clara, pero sí ya es posible hablar de algunas consecuencias.

Y es que los datos de población son usados para calcular distintas variables de las "políticas públicas" y, por ende, tener menos habitantes de los esperados, tiene consecuencias.

Basta decir que la cantidad de habitantes de una región, y su condición socioeconómica, son algunos de los parámetros que se emplean para definir los recursos del FNDR, como también para establecer las cuotas que cada municipio recibe del Fondo Común Municipal (FCM).

A esto hay que sumar subsidios habitacionales, subvenciones, los presupuestos de salud, becas, ayudas sociales e incluso cantidad de vacunas que se distribuyen (ver infografía), todos beneficios que tienen un componente cuantitativo.

Recursos

El economista Antonio Sánchez dijo que aunque las cifras arrojadas por el Censo pueden variar en diciembre (la primera entrega fue preliminar y acotada a regiones), espera que como consecuencia de ella venga un ajuste a nivel de recursos.

Sánchez comentó que cuando se realizan las asignaciones de los presupuestos globales -y contrario a lo que a veces sostiene la autoridad- siempre se produce una equivalencia entre la proporción de habitantes y la de recursos.

"Somos más o menos el 4% de la población nacional y la inversión en el tiempo varía entre 3,8%, 3,9%, a veces 4,2%, es decir, siempre la inversión pública va bordeando la participación en la población nacional. Por eso ahí viene un primer efecto", sostuvo.

Sánchez además manifestó preocupación por la participación de los inmigrantes en la cifra total de población regional, eso considerando que se trata de un segmento que demanda más cuidados del Estado y en el país no existen políticas especiales para ello. 

"Es gente que llega a trabajar con la familia, no tienen vivienda, ni red de apoyo, por lo tanto las exigencias hacia el Estado son mayores", dijo.

Proyectos

La diputada Marcela Hernando explicó que la población es también un factor que incide en la rentabilidad social de los proyectos públicos.

Por lo mismo, advierte que su variación incidirá en los parámetros de evaluación de las obras que se planifiquen.

"El Ministerio de Desarrollo Social evalúa los proyectos en función de a cuánta gente favorecen, no mide otras cosas. En ese contexto me parece que es muy significativo que lo que nos está mostrando este Censo, porque mientras menos gente hay, son menos las posibilidades de tener proyectos grandes", apuntó.

Hernando explicó que esta complejidad se presentará principalmente en las comunas pequeñas, que están sufriendo mermas de población en favor de las capitales.

Impacto

El director del Instituto de Políticas Públicas de la UCN, Cristian Rodríguez, planteó que el Censo tendrá un impacto por el dato cuantitativo (cantidad de personas), pero además por su faceta cualitativa (composición de la población).

Esto, porque demuestra que el crecimiento de la población se está desacelerando y por segmentos el que más crece es la población adulta.

"En países más jóvenes el segmento mayoritario va de cero a 18 años, pero cuando empieza esta transición demográfica los segmentos mayoritarios se corren y la más numerosa es la población adulta. Incluso en los países ricos es la población vieja", argumentó.

Según Rodríguez, el fenómeno obliga a pensar en políticas públicas, nacionales y locales, para una mayor población adulta y de tercera edad.

"Es gente que se enferma más, que requiere ciertas condiciones, y eso nos tiene que llevar a pensar en para quién se invierte", manifestó.

El experto destacó que otro desafío es generar ciudades más atractivas, para que la población que llega atraída por distintos factores, se quede.

Seremi

En tanto, el seremi de Gobierno, Víctor Flores, explicó que, aunque desalineados con las proyecciones, los datos del Censo evidencian un crecimiento y eso es relevante para la distribución de los recursos.

Flores distinguió entre lo que son las "expectativas de crecimiento" y el "dato real", y enfatizó en la relevancia de contar con este último.

El vocero de gobierno planteó, asimismo, que no existen motivos para dudar de la efectividad del resultado que arroje el Censo, pero hizo la salvedad que los definitivos son los que se entregan en diciembre.

En esto, subrayó por ejemplo, que hubo campañas especialmente dirigidas a asegurar la participación de la población migrante de la región, por lo que no considera posible que ésta se haya marginado de la encuesta y que por esa vía se explique diferencia entre expectativa y dato real.

Flores concordó en que el desafío que subyace es el de hacer más atractiva la región para que las personas que se radiquen, y en eso destacó los esfuerzos que desde el Gobierno Regional se realizan en diversificación y mejoramiento de calidad de vida.

599.335 personas habitan en la Región de Antofagasta, según los resultados preliminares del Censo. La cifra es inferior a la proyección del INE para 2017, que estimaba 640.950 habitantes.

50 años tendrían que pasar para que, al ritmo de crecimiento actual, la población de la región se duplique. Los expertos señalan la zona evidencia un proceso de "transición demográfica".

2,1 hijos por mujer es la tasa de fecundidad para la región, según el Anuario de Estadísticas Vitales del INE. Con esto, la zona apenas supera la tasa de remplazado generacional de la población.



Más información sobre Instituciones de Gobierno